En ocasiones, decidimos celebrar una cena en casa y sabemos muy poco o nada de nuestros invitados. Esta es una situación que, cuando te mudas de ciudad con frecuencia, sucede a menudo. Construir tus relaciones sociales usando desayunos, almuerzos y cenas como momentos donde conocerse es algo muy normal. Y es que todos comemos en algún momento del día!, así que utilizar esos espacios en nuestra agenda para compartirlos con los demás es práctico, además de agradable.
Dependiendo del lugar donde vivas, es más frecuente compartir estos momentos en establecimientos públicos o en las propias casas. Pero, de lo que no cabe ninguna duda es de que si tomas la decisión de recibir en tu casa, tu voluntad es la de agradar especialmente a tus invitados.
En este artículo te daré algunos tips para esa hora que precede a la cena, en la que el clima que crees influirá, y mucho, en el buen transcurrir de la velada. Pongamos como ejemplo una cena, porque suele ser lo más frecuente cuando se trata de un encuentro entre amigos.
Cuando tus invitados lleguen a la puerta de tu casa, recíbeles tú mismo/a o, si sois una pareja, la pareja.
Cuida la iluminación de la casa y en especial, la de la estancia donde se encuentre la mesa preparada. Es importante evitar luces generales frías. Con varios puntos de luz indirecta cálida, no sólo garantizarás una iluminación suficiente, sino que también crearás un espacio acogedor.
Salpica la casa con "flores y velas". Esta pareja de baile nunca falla!. Presta especial atención a la entrada de la casa, el aseo de invitados y la mesa principal (este arreglo floral merece especial atención y a ello dedicaré un artículo en este blog).
Crea una lista de reproducción de música para estas ocasiones. Sin ahondar en estilos de música, que ya sabemos que esto puede ser muy personal, procura escoger temas que resulten agradables, no muy estridentes o "marchosos", para no distraer en la conversación que se esté manteniendo y para que sirvan para cubrir los espacios de silencio, si es que se dan.
Ten preparada bebida, en su óptima temperatura, para ese aperitivo antes de la cena (algo de bebida no alcohólica, cerveza fría, un vino tinto suave y uno blanco). Ofrece a tus invitados algo de beber y acompaña esta bebida con un aperitivo.
Escoge un lugar para sentarse, charlar y tomar ese aperitivo antes de cenar. Este momento te permitirá dar tiempo a que todos los invitados lleguen y entablar una conversación para "romper el hielo" antes de pasar a la mesa.
Estos tips tan básicos pueden resultar obvios, pero no por ello son menos importantes. Aplícalos en tu siguiente encuentro! Me encantará saber cómo resultó!
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